EN EL DÍA DE LA MADRE
Madre no hay más que una y
eso lo he comprobado
pues cada vez que te vas
mi alma se rompe en pedazos.
Tus ojos mi agua de vida
tu pelo mi manta invernal.
Que si te he dañado como un rosal
perdóname madre mía
que no lo volveré a hacer más.
Y si lo hago lo siento
pues no lo quiero hacer
mis impulsos se arrepienten
cuando te vuelvo a ver.